martes, 21 de octubre de 2025

¡Vaya par de aldabas!

 O como el cine y, en general, la cultura influyen en el lenguaje.


Son muchas las expresiones que, en una época determinada, trascienden el ámbito en el que fueron creadas y permean en la sociedad quedándose para siempre, o por un largo espacio de tiempo, como expresiones populares.

El cine es una de las fuentes más importantes para esta traslación de frases célebres a la cultura popular. A todos nos vienen a la memoria frases como "Houston, tenemos un problema" (Apolo 13), "Te voy a hacer una oferta que no podrás rechazar" (El padrino), o “Elegí un mal día para dejar de esnifar pegamento” (Aterriza como puedas).

Pero me quiero detener en una que me parece especialmente curiosa. En los 70, los 80 y los 90 se generalizó la expresión “¡Vaya par de aldabas!” de “El jovencito Frankestein” (Mel Brooks – 1974). Magnifica comedia, parodia El doctor Frankenstein (James Whale – 1931), aunque el resultado dista mucho de la burla y se acerca más al homenaje. Seguramente es la única buena película de un director que, en mi opinión, aparte de esta, solo hacía basura. Tal vez el acierto se debe, en parte, aun magnífico guion que escribió al alimón con Gene Wilder, quien también fue el principal actor

La frase la pronuncia el joven doctor Frederick Frankenstein (Gene Wilder) cuando, al llegar al castillo de su antepasado e Igor (Martin Felman) llama a la puerta en la que hay dos enormes aldabas en la puerta. Sorprendido dice “¡Vaya par de aldabas!”. Su nueva y atractiva auxiliar, Inga (Teri Garr), se mira al escote y dice pícaramente “Gracias doctor”. En ese momento, todos hicimos la asociación aldabas-domingas.

Pero lo curioso del tema es que, en inglés, el doctor Frederick Frankenstein dice “What knockers!” y en inglés coloquial el término “knockers” tiene un segundo significado que es, precisamente “domingas”.

Así, un juego de palabras que se perdía en el doblaje se convirtió en algo mucho más grande, en una expresión que ha trascendido el mundo del celuloide y ha quedado en el español como una divertida expresión coloquial, aunque tengo la sensación de que entre las nuevas generaciones la expresión va perdiendo vigencia.

Aquí os dejo el enlace a las versiones en ingles y castellano

https://www.youtube.com/watch?v=2mo4cNFLC_c 

https://www.youtube.com/watch?v=LB_aegewceU 

Otro día hablaremos de las frases de los chistes que también se han quedado con nosotros en el lenguaje coloquial como “haber elegido muerte”, o “ya, ya, búho”.