Bueno, realmente está dedicado a una bella virgen que, según la leyenda, fue "abandonada" en una roca junto al mar por un pescador mientras este se fue a pescar. Como os podéis imaginar, vino una tormenta y la hermosa virgen murió.
Desde ese momento, los pescadores volvían a puerto sin un pez en las redes. Así que hicieron lo que a cualquier persona con dos dedos de frente se le ocurriría en estos casos (nótese la ironía): construir un pene gigante de madera para apaciguar al espíritu de la joven. Ni que decir tiene que el remedio funcionó y que los pescadores volvieron a pescar con normalidad.
Así que los aldeanos siguieron erigiendo estatuas en honor a la virgen fallecida.
Como veis, lo absurdo de la historia está a la altura de la extravagancia del parque, así que mis comentarios se reducirán al mínimo y dejaré paso a que las imágenes hablen por sí solas.
En la siguiente no me resisto al chascarrillo: tened cuidado dónde os sentáis.
¿Estará leyendo las instrucciones de uso?
Como veis, los visitantes pueden interactuar...
Y terminamos con unas imágenes en formato vertical, tal vez más apropiadas para el tema que tratamos hoy.
Cultura humana , interesante
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